Un remache es un elemento de fijación común que se utiliza para unir dos o más piezas de material. Suele estar hecho de materiales metálicos (por ejemplo, aluminio, acero, acero inoxidable, etc.) y se utiliza ampliamente en la construcción, la industria aeroespacial, la fabricación de automóviles, la electrónica y las aplicaciones marinas.
Sujetadores rotosSe utiliza comúnmente en lugares donde se requieren conexiones permanentes, especialmente cuando no es posible soldar ni atornillar. Puede unir firmemente diferentes materiales, como láminas de metal, plástico y madera, como marcos de metal en edificios, puentes, cascos de barcos, fuselajes de aviones, etc.
Los remaches se utilizan en el montaje de aviones y naves espaciales para soportar fuertes vibraciones, cambios de temperatura y otras presiones externas.
El fuselaje, las alas y otras partes de los aviones a menudo se conectan mediante remaches, y en la fabricación de automóviles, los remaches se utilizan para conectar diferentes partes de la carrocería, especialmente en procesos complejos donde no se puede utilizar soldadura.
Las conexiones remachadas proporcionan una resistencia estructural muy fuerte y mantienen un alto nivel de estabilidad, especialmente en entornos de alta temperatura, alta presión o vibración.
En comparación con la soldadura, las conexiones remachadas no requieren equipos de soldadura complejos, un proceso de instalación simple y son adecuadas para algunas ocasiones en las que no es posible soldar ni operar a alta temperatura.
RemachesNo solo son adecuados para metal, sino que también se pueden usar para conectar madera, plástico y otros materiales. En algunos entornos especiales (como barcos, aviones, etc.), los remaches pueden desempeñar un buen papel de sellado para evitar fugas de líquido o gas.